Dentro del ambiente de trabajo industrial existen diversos factores que ponen en riesgo tu vida. Existen muchos artefactos diseñados con el propósito de proteger tu cuerpo de agentes externos que puedan dañarlo. Uno de los órganos más sensibles son los ojos, sin la vista puedes poner tu vida y la de tus compañeros en peligro.
En los Estados Unidos se ha llevado a cabo un estudio, en el cual se han registrado diariamente alrededor de 1,000 lesiones oculares. Se ha reportado que éstas lesiones tienen un costo anual de hasta $467 millones de dólares. Según este estudio, tres de cada cinco trabajadores no estaban usando protección y alrededor del 40% de los que si lo hacían, no usaban la protección adecuada para la actividad que estaban llevando a cabo. Esto convierte a los Lentes de Seguridad Industrial en un elemento muy importante de tu equipo de trabajo.
Existen tres tipos de lesiones oculares:
- FÍSICAS: son las más comunes, causadas por partículas que pueden llegar hasta tus ojos como lo son trozos de madera, metal o incluso el polvo.
- QUÍMICAS: pueden ser causadas al trabajar con materiales químicos peligrosos en estado sólido, líquido o incluso gaseoso.
- TÉRMICAS: se producen al trabajar con materiales a altas temperaturas o en ambientes donde la temperatura es extrema, como por ejemplo hornos o refrigeradores.
En el mercado existen diferentes tipos de lentes de seguridad industrial, cada uno diseñado especialmente para el tipo de trabajo que tengas que llevar a cabo.
Dentro de los principales tres tipos de lentes están los fabricados a base de vidrio, éste material ayuda a prevenir rayaduras por lo cual tiende a ser más durable, protegen contra agentes químicos agresivos y además tienen la propiedad de poder ser fabricados de acuerdo a graduaciones médicas prescritas.
Otro tipo de lentes son los fabricados a base de plástico común, son mucho más ligeros y son usados principalmente para proteger a tus ojos de partículas como lo son pequeños trozos de madera, metal y salpicaduras de soldadura. Los lentes de plástico, a diferencia de los de cristal, están diseñados para prevenir el empañamiento.
Uno de los tipos más usados de lentes son los fabricados a base de policarbonato, éstos proporcionan la misma protección que los lentes de cristal y los de plástico común, sin embargo su material es mucho más resistente al impacto que los anteriores, también previenen el empañamiento y son resistentes a químicos abrasivos, su única debilidad es que sufren rayaduras fácilmente.
Prevención, Adiestramiento y Mantenimiento
Para evitar lesiones dentro del área de trabajo, es necesario que se lleve a cabo un análisis profundo de las operaciones de la planta. Se deben identificar las actividades y áreas que presenten un riesgo potencial a los ojos.
Una vez que se identifica cuando y dónde se deben proteger los ojos, es necesario entrenar a los trabajadores a identificar el tipo de lentes y el material adecuado para la actividad que van a realizar, por ejemplo: Si el trabajo consta en cortar las ramas de un árbol, los lentes de policarbonato pueden ser la mejor opción, ya que son los más resistentes al impacto, una rama podría romper los lentes de cristal o plástico común, pudiendo causar un un daño aún mayor.
Todo equipo de trabajo requiere de un adecuado mantenimiento para conservar su utilidad. Los lentes de seguridad deben ser limpiados y almacenados correctamente una vez que se dejan de usar. No deben de confundirse o mezclarse con lentes fabricados con materiales diferentes. Los lentes deben ser revisados periódicamente para asegurarse de que no necesitan ser reemplazados.
Con ésta información, trata de identificar cuáles son las condiciones de riesgo en tu área de trabajo y si consideras que el uso de Lentes de Seguridad es necesario. También identifica cuál es el mejor material para el tipo de actividad que llevas a cabo, de ésta manera podrás sentirte seguro para realizar tus actividades sin peligro.