En la industria comúnmente se utilizan diversos productos químicos en diferentes estados de la materia (sólido, líquido y gas). Este tipo de agentes químicos te pueden traer riesgos que puedan dañar tu salud.
Por otro lado existen los llamados: agentes biológicos que, a diferencia de los agentes químicos, éstos están formados por microscópicos seres vivos. En este artículo encontrarás los efectos que puede ocasionar cada uno, las medidas de prevención y otros datos interesantes que debes de saber respecto a estos tipos de agentes.
Riesgos provocados por agentes químicos
Los agentes químicos son aquellas sustancias químicas que pueden provocar algún efecto en tu salud cuando tienen contacto con tu organismo.
Existen tres maneras de que el agente químico ingrese a tu cuerpo y son las siguientes:
- Inhalación. Por medio del aire que respiras por la nariz o boca.
- Ingesta. A través de lo que comas y bebas.
- Cutánea. A través de la piel.
Cuando una sustancia química se pone en contacto con el organismo provoca diferentes lesiones en él. Sus efectos pueden ser de diferente magnitud: agudos o crónicos, dependiendo del tiempo de exposición o de qué tan peligroso sea el químico al que estamos expuestos.
Si la sustancia química es tóxica, sus efectos dependen de su composición y propiedades, así como de la respuesta inmunológica que tenga el cuerpo expuesto. Los efectos que pueden generar son los siguientes:
- Sustancias corrosivas. Son aquellas que destruyen los tejidos con que hacen contacto directo o también pueden causar daños al medio donde es transportado, desde su recipiente hasta su transporte. Algunos ejemplos de estas sustancias son: ácido clorhídrico, ácido nítrico, ácido sulfúrico, sosa cáustica, agua de amoniaco (hidróxido de amonio), entre otros.
- Sustancias asfixiantes. Este tipo de sustancias limitan la función de los pulmones, producen una considerable disminución de oxígeno, el monóxido de carbono (CO), cianuro y el humo, son ejemplos de estas sustancias.
- Sustancias anestésicas o narcóticas.- Son compuestos usados para disminuir el dolor, pueden llegar a destruir el sistema nervioso central, algunos ejemplos son: cloroformo, aspirina, metanfetaminas, por mencionar algunos.
- Sustancias irritantes.- Aunque el contacto sea durante poco tiempo, estas sustancias provocan alergias, daños en la piel o irritación en las zonas de contacto. Ejemplos: dióxido de nitrógeno, gases lacrimógenos, gas mostaza, etcétera.
- Sustancias cancerígenas, mutágenas y teratógenas. Estos tipos de sustancias provocan cambios en el material genético, pueden provocar cáncer y hasta producir alteraciones en el feto durante su desarrollo.
Recomendaciones de seguridad para riesgos químicos
Algunas recomendaciones de seguridad que te serán de gran ayuda para disminuir o mitigar el riesgo químico son:
- No fumar, comer, beber ni almacenar víveres dentro del laboratorio, para evitar confusiones con los químicos.
- Consultar y tener a la mano siempre la ficha de datos de seguridad (FDS) de cada una de las sustancias para conocer el tipo y los riesgos que pueda ocasionar su manejo.
- Utilizar el EPP específico dentro del laboratorio.
- No utilizar material no etiquetado.
- Etiquetar material adecuadamente.
- Si se va a reutilizar el material, se deben de eliminar todas las etiquetas que tenga y poner una nueva etiqueta.
- Nunca oler directamente un recipiente, si es necesario ventila con tu mano sobre la superficie del contenedor para percibir su olor.
- Cuando el químico tiene la propiedad de ser muy volátil o produce un olor muy fuerte, utilícelo bajo la campana de extracción.
- Utilizar el cabello recogido y no usar joyería.
- Mantener siempre limpia y en orden el área de trabajo.
- Disponer el material desechable en sus contenedores especiales de acuerdo a su confinación escrita en las hojas de seguridad.
- Avisar inmediatamente a tu supervisor si ha ocurrido un accidente.
Riesgos provocados por agentes biológicos
Como ya había mencionado anteriormente, este tipo de agentes están conformados por seres vivos, comúnmente la percepción de ellos es casi imposible debido a su tamaño microscópico.
Los contaminantes biológicos pueden ser: bacterias, hongos, protozoos, virus, larvas y gusanos parásitos. Se clasifican en cuatro tipos según su riesgo:
Tipo I. Contaminantes biológicos que es poco probable que causen daño al ser humano.
Tipo II. Contaminantes patógenos que provocan enfermedades, poco probable que se propaguen y se pueden tratar fácilmente, por ejemplo: virus de la gripa, herpes, etc.
Tipo III. Contaminantes patógenos que provocan enfermedades graves, se pueden propagar y se pueden tratar, por ejemplo: bacterias que causan tuberculosis, virus de la hepatitis o el SIDA.
Tipo IV. Contaminantes patógenos que provocan enfermedades graves, se pueden propagar fácilmente y no existe tratamiento alguno para ellas, un ejemplo claro es el virus del Ébola.
Recomendaciones de seguridad para riesgos biológicos
Para mitigar daños por los agentes biológicos, debes de tomar en cuenta las recomendaciones del riesgo químico aunado a:
- Delimitar y señalizar el área de trabajo.
- Mantener el área aséptica (extrema limpieza) así como una buena higiene personal.
- Esterilizar el material de vidrio antes de ser utilizado.
- Utilizar el EPP adecuado según la actividad a realizar (guantes, gafas, careta, etc.).
- El transporte del agente biológico siempre será en un material que pueda sellarse para evitar derrames.
- Realizar todas las actividades de manera cuidadosa.
- Desinfectar el equipo en caso de un accidente de derrame, después de esperar 5 min por lo menos.
- Nunca desechar junto con otro tipo de residuos. Para la confinación del material biológico se debe de realizar una correcta gestión de residuos.
Siempre es mejor tomar precauciones al momento de realizar actividades que te expongan a riesgos biológicos o químicos, recuerda que tu salud es primero.
Fuente: blogseguridadindustrial.com